El móvil sonó, como cada mañana. Alex miró el reloj, para empezar a prepararse para ir al instituto. Aun eran las 6.30, y ella se solía despertar media hora más tarde. Extrañada (pues era la segunda vez en esa semana que le pasaba) miró el teléfono. Otra vez, mensaje de un desconocido. Otra vez ese ''buenos días, princesa'' en su móvil.Llegó al instituto y abrió, como cada mañana, su taquilla.
- ¡Buenos días, Alex! -La saludó Missy.- ¿Qué tal estás?
+ No muy bien, hoy me han vuelto a despertar con el mensaje que te conté ayer.
- ¡Ohhhh! -exclamó su amiga- Eso es precioso. Ojalá me pasara a mi lo mismo.
+ ¿¡Qué dices de precioso!? Si al menos supiera quién me lo manda...
De repente, algo cae de dentro del libro de Literatura de Alex.
- ¡Mira! Una notita..
+ ¡Trae! Estaba en mi libro, y la leo yo.
``¿Qué tal, princesa? ¿Te gustó mi mensaje? Supongo que te mueres por conocerme..´´
No podía ser.. El "desconocido" estaba en su instituto..
+ Missy.. ¿te imaginas que fuera... él?
- ¡Dios! Haríais una pareja perfecta.. ¿pone algo de dónde o cuándo podríais quedar?
+ Sí, hoy en el comedor, en la mesa del fondo.
- ¡No lo pienses! Tienes que ir, ¡llevas enamorada de él desde que entraste en el instituto y te llevé al partido de baloncesto para que conocieses gente!
A la hora del almuerzo Missy se sentó con Alex en una mesa cercana a la de la nota.
"Beep... beep..." Un mensaje.
``Princesa, girate y descubrirás a tu desconocido´´.
Alex se giró. Era él. El capitán del equipo de baloncesto. Un chico guapísimo.
~ Buenos días, mi princesa..
